top of page
Buscar
  • Juan Pablo Alvarado García

Pericias Física: una herramienta esencial contra el tráfico de armas


En la mayoría de los casos en los que interviene un arma de fuego en un hecho delictivo, dicha arma esta adulterada o presenta suprimida su numeración de registro, o bien se encuentra presente pero no consta su registro legal. Esto último significa que dicha arma, de producción industrial, ha tenido una elaboración y/o un ingreso al país de una manera clandestina.

En una calle solitaria que atraviesa una finca, Danny Hernández Fernández, recibió una ráfaga de proyectiles de arma de fuego. Eran aproximadamente las 10:30 de la mañana del miércoles 2 de marzo de 2022. Hernández viajaba en un vehículo junto a cinco hombres más, al parecer fueron emboscados por varios sujetos que los obligaron a bajarse y les dispararon en la cabeza, pecho y extremidades; recibieron entre 16 y 18 disparos. Los cadáveres quedaron tendidos a 500 metros de la entrada de la Finca Los Pintos, en Matama de La Bomba en Limón.


Durante las diligencias en la escena del crimen los investigadores encontraron varias evidencias como armas de grueso calibre.
Durante las diligencias en la escena del crimen los investigadores encontraron varias evidencias como armas de grueso calibre.

La posible dinámica de los hechos, apuntan a que en apariencia la masacre se dio por un enfrentamiento entre dos grupos delictivos, siendo que por razones que se investigan, uno habría emboscado al otro.


Por la cantidad de balas que perforaron a las víctimas se presume que las armas utilizadas habrían sido tipo AK-47, un arma prohibida en Costa Rica.


En los últimos diez años, el avance sin control del narcotráfico ha modificado por completo el poder de fuego en manos de organizaciones criminales. Datos del Ministerio de Seguridad Pública (MSP) indican que 2.095 armas fueron incautadas durante el 2022. La violencia está asociada directamente con el crimen organizado, pues el mayor porcentaje de los 657 homicidios -récord histórico- del año anterior fueron por ajustes de cuentas en hechos vinculados a la lucha por el control de territorios y eliminación de grupos rivales en el llamado narcomenudeo.


La disputa territorial del narco ha hecho emerger otro de sus negocios: el tráfico de armas. Aunque en la mayoría de los países el acceso a armas de fuego está sujeto a estrictas restricciones, analizar el flujo ilícito del armamento evidencia la relación de este fenómeno.


Armas de grueso calibre decomisadas tras un operativo que denominó “Operación Amandita” en el 2021.
Armas de grueso calibre decomisadas tras un operativo que denominó “Operación Amandita” en el 2021.

El informe 2021 sobre “Armas de fuego y extorsión en Centroamérica”, elaborado por la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional (GI-TOC por sus siglas en ingles), estima que en Costa Rica el número de armas en posición de civiles es de 493 000, donde un 52% corresponde a armas ilegales. Mientras que el “Índice Global de Crimen Organizado 2021”, sitúa el tráfico de armas como el tercer mercado criminal más predominante a nivel mundial.


Los esfuerzos internacionales por establecer acuerdos que logren controlar el trasiego de arsenales son cada vez más frecuentes, pero no siempre son eficaces y encuentran obstáculos significativos en los aparatos burocráticos y en el marco normativo aplicable en los distintos países. (González J. 2014)


Randall Zúñiga López, Director General a.i, del OIJ señala que “se ha observado una evolución en lo que respecta a las modificaciones o alteraciones efectuadas a las armas de fuego, con el objetivo de tener mayor versatilidad y poder de fuego. Ocasionando de esta manera que grupos criminales traten de conseguir en el mercado negro armas que poseen las características idóneas para ensamblar partes o modificarlas según las necesidades. Anteriormente durante los allanamientos únicamente se ubicaban armas cortas tipo pistola o revolver y ahora es común decomisar armas de grueso calibre como la AK-47 o AR15”.


En 2019 se aprobó en el país la Ley 9731 como reforma a la Ley de Armas Explosivos que dispone que una persona solo podrá tener registrada dos armas de fuego, así como un aumento en las penas de tenencia ilícita de armas tanto legales como prohibidas.


De esta manera en Costa Rica se han realizado esfuerzos para mitigar el tráfico de armas y mejorar las herramientas de control como se establece en el Código Procesal Penal en el artículo 88 el cual indica que:


"Se sancionará con pena privativa de libertad de tres hasta cinco años de prisión, a quien mantenga bajo su posesión, en forma ilegítima, un arma de fuego permitida que no se encuentre debidamente inscrita, ante el Departamento de Control de Armas y Explosivos, a su nombre o a nombre de una persona jurídica que le autorice su portación, tenencia y/o uso."


Por otro lado, el artículo 89, que se refiere a actividades con armas prohibidas, menciona que "se impondrá una pena privativa de libertad de cuatro a ocho años, a quien posea, adquiera, comercialice, transporte, almacene, introduzca al territorio nacional, nacionalice, exporte, oculte, fabrique, ensamble, transforme, ejerza labores de corretaje nacional o internacional o utilice armas prohibidas por esta ley, sus partes y componentes"; mientras que el artículo 88 bis sobre portación ilegal de armas permitidas establece que "se sancionará con pena privativa de libertad de dos hasta cuatro años de prisión, a quien porte un arma de fuego permitida, debidamente inscrita, pero sin contar con el debido permiso. Si el arma no está inscrita o la portación se realiza dentro de alguno de los supuestos de delincuencia organizada o asociación ilícita, la pena se incrementará un tercio."


El precio de las armas de fuego ilícitas puede variar enormemente en función de la distancia a la que se encuentren de la fuente, de si están disponibles legalmente en un territorio, de sus características (marca, modelo y calibre) y de su estado (nueva o usada). (Vázquez, G. 2022)

Armas robada en febrero del 2021 en la Academia Nacional de Policía y recuperadas un mes después tras un operativo en La Rita de Pococí.
Armas robada en febrero del 2021 en la Academia Nacional de Policía y recuperadas un mes después tras un operativo en La Rita de Pococí.

El mercado negro se surte, en gran medida, de armas robadas de los depósitos policiales, un ejemplo al parecer fueron los 700 fusiles Kalashnikov (AK47) sustraídos en el 2015 de la Dirección Nacional de Servicios Especiales e Investigación (DNSEI) de Honduras; así como las que son robadas a las empresas de seguridad privada que operan en nuestro territorio y en los países centroamericanos. También, es abastecido desde los países que están en el norte del continente americano, la mayoría provienen de Estados Unidos y México.Modificadas para hechos delictivos.


Los grupos de crimen organizado tras adquirir en el mercado negro las armas para incrementar su arsenal, modifican o alteran muchas de las partes de estas para incrementar su capacidad de fuego y potencia; razón por la cual, cuando son decomisadas, deben ser enviadas a la Sección de Pericias Físicas del Departamento de Ciencias Forenses (DCF) para su respectivo análisis.


Otro de los métodos utilizados por la delincuencia es suprimir la numeración de cada arma robada para introducirlas al mercado ilegal, y así “evitar” que se conozca el último poseedor legal.


Julio Hernández Navarro, jefe de la Sección de Delitos Varios del Departamento de Investigaciones Criminales (DCRI) del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) señala: “los delincuentes con el fin de culminar la trazabilidad de las armas y de esta manera no poder vincular a una persona en específico les realizan diferentes alteraciones. Además, los delincuentes creen que con esto las autoridades no lograrían acreditar la comisión de algún delito por las modificaciones realizadas”.


Por su parte Luis Diego Méndez Torres, perito judicial de la Unidad de Balística de la Sección de Pericias Físicas, explica: cada arma de fuego lleva acuñado, por sistemas varios, una numeración de fábrica. Este código debe ser coincidente en cada una de las partes principales del arma de fuego, y por el mismo se registra legalmente ante la Dirección General de Armamento del Ministerio de Seguridad Pública para acreditar su auténtica tenencia.

Personal de la Unidad de Balística de Pericias Físicas del DCF laborando en la pericia de revelado de serie.
Personal de la Unidad de Balística de Pericias Físicas del DCF laborando en la pericia de revelado de serie.

Es así que, en las causas en las que se decomisan armas de fuego, se realiza el peritaje balístico para determinar, preliminarmente, si las mismas funcionan y/o son aptas para producir un disparo o bien si su aptitud impide el disparo, por lo que no presentaría poder de letalidad.


La Balística Forense es la disciplina que se encarga del conocimiento de las armas de fuego, la munición, los fenómenos y efectos propios de los disparos de estas armas, de utilidad para la prueba y el esclarecimiento en los hechos de interés de la Justicia. Allí radica la importancia de la ejecución de una profunda pericia balística. (Campos, R. 2010)


“Con las pericias físicas realizadas se puede determinar la identificación de las mismas y de esta manera dar una posible trazabilidad. Además de funciones básicas de disparo y posibles alteraciones a las que hayan sido expuestas para dar mejor y mayor velocidad en su respuesta; por ejemplo, convertir un arma semiautomática (tiro a tiro) a automática (consideradas ilegales)”, señala Julio Hernández Navarro, jefe de la Sección de Delitos Varios del Departamento de Investigaciones Criminales (DCRI) del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).


Gracias a los adelantos de las Ciencias Forenses en materia de balística, el número de serie de las armas de fuego se pueden recuperar mediante diversas técnicas, lo cual facilita la identificación completa del arma que puede estar involucrada en los delitos investigados.


Arma recibida en la Unidad de Balística que muestra una posible alteración en el serial.
Arma recibida en la Unidad de Balística que muestra una posible alteración en el serial.

Según explicó el perito judicial, la delincuencia utiliza diferentes técnicas para “borrar” dicho numeral por medio de alguna herramienta que genere abrasión como, por ejemplo: rellenado, raspado, esmerilado, taladrado, golpeado, entre otros.


El método a aplicar para la recuperación de los números de serie dependerá de la zona donde el fabricante haya grabado el número serial, que por lo recurrente es sobre el receptor, que es en metal y en la mayoría de los casos sobre acero, aunque no se descarta sobre el polímero y zinc en algunos modelos y marcas de armas de fuego.


“El principio físico en que se basa la recuperación es que la grabación se habrá hecho por presión o impacto con lo que las partículas de metal se habrán visto comprimidas más allá del alcance de la grabación, Se pueden tratar las capas inferiores del metal de forma que se uniformice su reflexión a la luz. Por haber sido comprimidas su respuesta será diferente a la del resto del metal, pero semejante a otras capas comprimidas por lo que podrá volver a verse la numeración.” (Moraga, M. 2018)


Los métodos más conocidos para la recuperación de seriales en armas de fuego y que son utilizadas en la Unidad de Balística de la Sección de Pericias Físicas, y deben cumplir lo establecido en la acreditación otorgada por ANSI National Accreditation Board (ANAB), ente Acreditador Internacional de los Estados Unidos de América, son:



Superficie con serie revelada BC1KF5 con método magnético. El imán usado se aprecia en la parte inferior de la placa.
Superficie con serie revelada BC1KF5 con método magnético. El imán usado se aprecia en la parte inferior de la placa.

Electromagnético: Método no destructivo que utiliza partículas magnéticas. El arma se magnetiza fuertemente y se añade a la zona en cuestión un aceite con suspensión de partículas metálicas de hierro. La turbulencia magnética generada por la comprensión en la zona de grabado hace que las partículas se adhieran preferentemente en esa zona.



Serie revelada por peritos del OIJ en el marco de pistola marca Glock.
Serie revelada por peritos del OIJ en el marco de pistola marca Glock.

Químico: Se utilizan diversos agentes previo pulimento de la zona a tratar. Cabe destacar que es el método más usual dentro de los servicios periciales.


“Hay que recalcar que la efectividad de cada método depende del tipo de técnica a implementar para quitar el serial, sin embargo, no todos los métodos son efectivos sobre ciertos soportes, hay que conocer las características del receptor y dependiendo de ello, el método será el más viable sin alterar por completo el arma de fuego. Puesto que de eso se trata la técnica, obtener resultados visibles fiables y comprobables sin dañar el indicio como lo es el arma de fuego”, menciona el perito judicial Luis Diego Méndez Torres.


Luego de que la pericia es realizada, el arma es devuelta a la autoridad judicial solicitante (OIJ, Ministerio Publico o Judicatura) para que sea enviada a la Dirección General de Armamento (DGA) del Ministerio de Seguridad Pública para su respectiva destrucción.


Durante el 2022 la Unidad de Balística recibió un total de 839 armas para ser analizadas, en donde se realizó el procedimiento de revelado a 170 armas (un 20% del total de solicitudes).


Datos de la “Memoria Anual del OIJ 2022”, indican que el 72% de los homicidios registrados en el país fueron cometidos con algún tipo de arma de fuego; para contrarrestar el tráfico de armas y municiones el OIJ realiza diferentes acciones.


“Desde la óptica policial se han integrado las publicaciones de manera preventiva para que la ciudadanía conozca los peligros y penas a los que están expuestos por adquisiciones anómalas, donde muchos de ellos manifiestan que son adquiridas para protección sin tener los conocimientos básicos en manejo y manipulación de armas. Además, se insta constantemente a las personas a informar sobre posible comercio en las zonas más vulnerables, se realizan trabajos interinstitucionales con los otros entes policiales para abarcar más regiones y con personal capacitado. También, se hacen monitoreos continuos en las redes sociales y se han establecido convenios con empresas de paqueterías”, manifestó el jefe policial de la Sección de Delitos Varios.


Bibliografía


Urrego, E., Solano, J., Muñoz, F., Valencia, J., & Castaño, A. (2018). LA BALÍSTICA FORENSE RECONSTRUCTIVA COMO APOYO A LA ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA. Bogota: Policia Nacional de Colombia.


Mercado, G. V. (2022). TRÁFICO DE ARMAS Y CRIMEN ORGANIZADO: Comercio mundial, impactos locales. Ginebra: Global Initiative Against Transnational Organized Crime.


Mercado, G. V., Félix, L., & Carballo, G. (2021). Armas de fuego y extorsión en Centroamérica. Ginebra: Global Initiative Against Transnational Organized Crime.


Montejo, M. (07 de marzo de 2018). Apuntes de la Balistica Forense. Obtenido de MONOPDF: https://nanopdf.com/download/manuel-moraga-montejo-perito-judicial-en-balistica-forense-pagina_pdf


Noriega, L. (2021). Índice global de crimen organizado. Ginebra: Global Initiative Against Transnational Organized Crime.


Campos, R. (2010). Prueba pericial de balística: su aplicación y valoración en el Proceso Penal costarricense. San José: Universidad de Costa Rica (UCR).


Gonzalez, J. (2014). TRÁFICO DE ARMAS: Entorno, propuestas legislativas y opinión pública. CDMX: Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados de México.


REDACCIÓN. (22 de noviembre del 2015). Roban 700 AK47 de bodega de la Policía de Honduras. La Prensa. https://www.laprensa.hn/honduras/roban-700-ak-47-de-bodega-de-la-policia-de-honduras-CVLP904251#image-1


405 visualizaciones0 comentarios
Publicar: Blog2_Post
bottom of page