- Marisel Rodríguez Solís
Asesinos en serie: Homicidas que no aparentan lo que son
Por Marisel Rodríguez S.
mrodriguezsol@poder-judicial.go.cr
Según Robert K. Ressler, creador del término “asesinos en serie”, ex agente de la Oficina de Investigación Federal (FBI por sus siglas en inglés) y experto en perfiles y capturas de esos homicidas, hay dos tipos de asesinos seriales, el organizado “…legalmente cuerdo…” y el desorganizado “…claramente demente…”, y, aunque aclara que existen pocos casos, también hay en la historia algunos asesinos “mixtos”, como Jeffrey Dahmer, conocido como “el carnicero de Milwaukee”, quien fue acusado de matar a diecisiete personas menores de edad en Ohio, Estados Unidos.
Para Raymond Valverde, Exjefe y Psicólogo de la Sección de Apoyo Psicológico Operacional (SAPSO) del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los asesinos en serie generalmente inician sus experiencias de manera desorganizada, pero, conforme pasa el tiempo y adquieren mayor experiencia, se van transformando en asesinos más organizados.
Para el FBI, la respuesta a la pregunta ¿Cómo se transforman estas personas en asesinos seriales? está en el desarrollo del individuo, desde su nacimiento hasta su edad adulta.
“…Especialmente, el comportamiento de las personas está influenciado por las experiencias de vida, tanto como los factores biológicos. Los asesinos seriales son producto de factores hereditarios, su educación, y las opciones que elija durante su desarrollo…” reza en la página web del FBI http://www.fbi.gov
En muchas de las ocasiones, según los psicólogos forenses y agentes de investigación, los asesinos seriales son gente común y corriente, con una vida aparentemente normal.
Tres mitos comunes
Uno de los mitos que los expertos del FBI señalan es que los asesinos en serie son personas que aparentan ser disfuncionales. Todo lo contrario, “… muchos han tenido esposas y niños, y un trabajo de tiempo completo, y han sido muy activos en su comunidad o iglesia, o en ambas…”
Por otro lado, se tiende a pensar que los asesinos en serie son sólo hombres, sin embargo, la historia demuestra que hay casos muy conocidos de mujeres asesinas en serie, aunque son muchas menos que los hombres. Datos estadísticos demuestran que las mujeres cometen sólo un 14% de los delitos violentos en el mundo. (www.psicologiayautoayuda.com)
Algunos de los casos más comunes de asesinas en serie son las llamadas “viudas negras”, como las estadounidenses Blanche Taylor Morre, Margie Velma Barfield, Waneta Hoyt y Belle Gunness. Según los psicólogos, en el caso de las asesinas en serie, a pesar de que maten por el simple placer, siempre obtienen algún beneficio.
El tercer mito que nos muestran las series y películas en la televisión y el cine es que los asesinos en serie quieren ser capturados, y es por eso que dejan algunas pistas para ser reconocidos. Según el FBI los asesinos matan sin querer ser descubiertos, es por eso que tienen mucho cuidado cuando están cometiendo el crimen.
¿Cómo se construye el perfil de un asesino en serie?
Según Valverde, hay varios símbolos que caracterizan la comisión de un delito. De esta manera, los criminales en serie siempre dejan su huella plasmada en los diferentes eventos que cometen, independientemente de si son homicidios, asaltos, robos, violaciones y otros.
En el caso específico de los asesinos en serie, es posible, con los estudios recientes y las estadísticas, determinar incluso la nacionalidad de la persona.
Cuando se crea el perfil del asesino, se puede determinar su edad, sexo, características demográficas y psicológicas y la motivación que origina la comisión del asesinato, entre otros.
Los investigadores se valen de los datos que arrojan los escenarios del delito, y así recopilan elementos suficientes para determinar el perfil del asesino en serie. Por ejemplo, los rituales que realizan con los cuerpos, el arma que utilizan, el lugar, la edad y el sexo de las víctimas, los diferentes elementos encontrados en la escena del crimen y el móvil. Según Ressler, el móvil del 90% de los asesinos seriales es de carácter sexual.
Para el experto los más difíciles son los asesinos organizados pues “…algunos de los más crueles han llevado vidas normales, han tenido trabajos y empresas, mientras desarrollan sus fantasías en la oscuridad. La única opción para cogerlos es que alguien cercano detecte el peligro y lo denuncie…” lo cual, según el investigador, ha sucedido en diversas ocasiones.
En Costa Rica
Uno de los casos más conocidos que hay en nuestro país sobre los asesinatos en serie es el del llamado “Psicópata” y más recientemente el asesino de indigentes en Limón, el caso del homicida serial también de Limón, Florentino Elizondo, así como el conocido “Mata indigentes” de San José, quienes ya tienen una sentencia condenatoria, y de este último caso les hablaremos en una próxima publicación. Si bien, el Lic. Valverde asegura que no todo psicópata es un asesino en serie, lo cierto es que todo asesino en serie es un psicópata.
En nuestro país, el caso del Psicópata tardó varios años de investigación, desde mediados de los años ochenta y se extendió hasta los noventa, invirtiendo gran cantidad de recursos humanos y tecnológicos, así como la alianza con agentes de gran trayectoria y experiencia del FBI que asesoraron a nuestra policía nacional. A este asesino en serie se le atribuyen al menos 19 homicidios perpetrados a parejas.

Michael Soto, quien actualmente es Ministro de Seguridad de Costa Rica y que en su momento fue uno de los agentes que participó en las investigaciones sobre el caso del Psicópata y en la creación del perfil de este asesino asegura que para perfilar al homicida se estudió caso por caso, logrando grandes coincidencias como la zona geográfica, denominada el “Triángulo de la Muerte”, que comprendió Desamparados, Tres Ríos y Patarrá. También se evidenció que siempre el móvil de los hom

icidios fue de carácter sexual, la mayoría fueron cometidos cerca de algún río, en zona rural, y el ritual fue dirigido hacia la mujer, restándole importancia al hombre de la pareja atacada.
También se determinó que el “Psicópata” era posiblemente un hombre que actuó solo y tenía conocimientos militares.
Para Eligio Jiménez, otro de los investigadores que trabajó en el caso del “Psicópata”, los detalles encontrados en los cuerpos fueron de gran importancia para trazar un perfil del homicida.
En cuanto al presunto asesino de indigentes en Limón, según Gerald Campos, actual Subdirector General del OIJ y en su momento Jefe de la Delegación Regional de Limón, gracias a los exámenes forenses realizados a las cinco víctimas encontradas, se ha determinó que en cuatro de los casos, el ADN encontrado coincidió con un mismo sujeto.
Campos asegura que, en ese caso el modo de operar en cada una de las muertes fue el mismo. Estos elementos, siempre hicieron pensar a la policía judicial que se trató de un asesino en serie.
Por otro lado, según Soto, los asesinos seriales más reconocidos realizan cada uno de sus crímenes con al menos dos meses de diferencia, y actúan por muchos años, sin que los capturaren.
Por su parte, Jiménez asegura que actualmente existen mayores estudios, elementos y nuevas tecnologías que facilitan las investigaciones de asesinos seriales.
¿Qué es un asesino en serie?
Según Robert K. Ressler, creador del término “Asesinos en Serie”, dicho término “… significa una serie de tres o más homicidios, que tienen características similares las cuales sugieren la posibilidad razonable de que hayan sido cometidos por un mismo actor o actores…”
Se debe hacer la distinción entre “asesinos en serie” y “asesinos múltiples”. Estos últimos se refieren a un solo hecho en el que se acabó con la vida de muchas personas a la vez. Este es el caso por ejemplo del homicida de Liberia, Gerardo Ríos Mairena, quien en un solo echo asesinó a 5 estudiantes e hirió de gravedad a otra joven, quienes eran amigos y familia; algunos de ellos vivían en la vivienda en la que se hallaron los cuerpos.
Pero, para que un asesino sea serial debe tener tres o más víctimas, en tres o más eventos. Puede estar dentro de una misma zona geográfica, pero por lo general las locaciones son diferentes para cada evento y siempre tendrá un lapso entre un homicidio y otro.
Asesinas en serie
Según el sitio www.psicologiayautoayuda.com un 74% de las asesinas en serie lo hacen por dinero, un 13% para controlar a sus víctimas, un 11% por placer y un 10% por sexo. Las armas más elegidas entre las mujeres son el veneno en un 80% y las armas de fuego en un 20%; aunque existen otros métodos como la asfixia y el arma blanca.
Algunas de las asesinas en serie han sido catalogadas como “viudas negras”, tales como Blanche Taylor Moore, de Carolina del Norte en Estados Unidos, quien asesinó a su padre, suegra, maridos y amantes; y fue condenada a morir por inyección letal en 1989.
Otra es Margie Velma Barfield, del mismo lugar, quien mató a sus siete maridos, varios novios y a su madre. Murió por inyección letal en 1978.
Otras mujeres conocidas por realizar asesinatos en serie han sido llamadas “Ángeles de la Muerte”. Son caracterizadas por trabajar en sistemas de salud, o cuido de adultos mayores y niños. Una de las más famosas fue Genene Jones de Texas, quien era una enfermera que asesinó a once niños con medicamento para el corazón. Fue condenada a cadena perpetua en 1989.
También existen familias asesinas lideradas por mujeres. Este es el caso de una familia afgana, comprendida por la mujer llamada Shirin Gul, su hijo Samiullah, de 18 años y su pareja sentimental Rahmatullah, quienes se dedicaban a parar taxis, para luego asesinar al taxista y vender el auto en la frontera con Pakistán por diez mil dólares americanos.
Las investigaciones iniciaron en el año 2004. En el jardín de la vivienda donde residían se encontraron seis cadáveres de hombres; y en una vivienda donde habían vivido anteriormente se encontraron otros 18 cuerpos más, incluyendo el del esposo oficial de Shirin.
Asesinos en serie reconocidos a nivel mundial
Luis Alfredo Garavito: colombiano a quien se le acusó de la muerte de 172 niños ocurridos en 59 diferentes municipios del país. Se hizo pasar por vendedor ambulante, monje, indigente, discapacitado y otros para cometer sus crímenes. Sus víctimas eran niños y niñas entre los 6 y 16 años, en su mayoría de un estrato económico bajo. Los abordaba en diferentes sitios, les ofrecía dinero y los invitaba a caminar por sitios solitarios, hasta que se cansaban, y los atacaba. Los cuerpos de los y las niñas fueron encontrados degollados, mutilados y con marcas que hacían pensar que pudieron estar amarrados.
Según los datos del propio gobierno colombiano, la sumatoria de las condenas es de 1.853 años y nueve días de prisión, por los delitos por los que ha sido sentenciado.
Según el gobierno de Colombia el caso fue de difícil solución. El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de ese país se dio a la tarea de investigar las múltiples desapariciones de niños y niñas en la zona de Quindío y otros departamentos del país. “La complejidad de la investigación exigió el diseño de una estrategia que puso a prueba toda la capacidad humana, técnica y científica del CTI…” especifica la página del gobierno http://www.fiscalia.gov.co .
Para la policía colombiana fue muy difícil el reconocimiento de las víctimas ya que los cuerpos se encontraban muy descompuestos, e incluso en muchas de las ocasiones se halló sólo las osamentas fracturadas y esparcidas, a las que hubo que hacerles diversos exámenes de ADN.
Andrei Chikatilo: ucraniano, conocido también como el “carnicero de Rostov”. Según los informes policiales, llevaba una doble vida, ya que fue un padre de familia de dos hijos, trabajador, y miembro respetado del Partido Comunista de la antigua Unión Soviética Rusa (URSS).
Chikatilo practicaba el canibalismo con sus víctimas y según las investigaciones, tenía problemas sexuales.
La historia de su vida indica que su madre les contaba a él y a su hermana una historia macabra, de cómo su hermano mayor había sido raptado y devorado, en tiempos de hambruna en Ucrania.
Siempre fue introvertido, y tuvo problemas con sus compañeros de escuela y luego con sus alumnos cuando se convirtió en profesor, y le apodaron “el ganso”.
A los 42 años mató a su primera víctima, que era una niña de 9 años de edad. Con ella forcejeó y le propinó una cortada, de la cual le brotó sangre. Cuando Chikatilo vio la sangre se excitó y así fue como hizo la relación entre sangre y sexo.
Este asesino tenía una particularidad que dificultó a la policía su aprehensión. El tipo de ADN de su semen es diferente al de su sangre, por lo que los análisis del semen encontrado en los cuerpos, no coincidía con las muestras de ADN de la sangre del asesino. Según la investigación, su captura fue fortuita, ya que cinco días antes de detenerlo, la policía lo vio salir del lugar donde encontraron su última víctima, con la ropa manchada de sangre.
Chikatilo fue arrestado de manera definitiva el 20 de noviembre de 1990 y tiene a su haber 53 víctimas. Fue ejecutado el 16 de febrero de 1994 en la prisión de Moscú.
Charles Milles Manson (de donde se presume que proviene el nombre del artista Marilyn Manson): nació en Cincinnati, Ohio, Estados Unidos de América. Su madre era una adolescente de 17 años, que estuvo en prisión durante los primeros ocho años de vida de Manson. Era una mujer alcohólica.
Desde muy pequeño tuvo problemas con la justicia, sin embargo, a sus 19 años de edad se casó y tuvo a su primer hijo. Luego se separó y cayó en prisión, en donde estudió el esoterismo y fue así como se involucró en la Iglesia de la Cienciología.
Después de que salió de prisión, su doctrina fue muy bien acogida en California. Vivió con dos mujeres a la vez y creó toda una institución de hippies, drogas, sexo libre y rock and roll, llamada “La Familia” proclamándose a sí mismo como el “Anticristo”.
Manson y su “familia” mataron a varias personas en un barrio californiano denominado Cielo Drivey, en venganza por haberle copiado algunas de sus ideas sobre música.
En algunas de las paredes de las casas donde asesinaban dejaban escrita con sangre la leyenda de “¡Cerdos!”.
Manson y la mayoría de los miembros de su “familia” fueron detenidos el 12 de octubre de 1969 debido a que una de sus miembros, de apellido Atkins, había sido detenida por uno de los crímenes, confesando lo que ella y el resto de “la familia” habían hecho.
Jeffrey Dahmer “el carnicero de Milwaukee”: estadounidense, oriundo de Ohio. Tenía tan sólo 18 años cuando mató por primera vez. Fue detenido en 1991 y confesó, no sólo los diecisiete asesinatos, sino que también indicó cómo había tenido relaciones sexuales con los cadáveres, canibalismo y terribles torturas antes de asesinar a sus víctimas.
Dahmer confesó, en una entrevista personal con Robert Ressler que en muchos momentos intentó dejar de hacerle daño a las personas.
Incluso, manifestó que en 1983 comenzó a frecuentar una iglesia junto con su abuela, para “enderezar” su vida. Sin embargo, en 1986 un nuevo episodio se originó en su vida y comenzó de nuevo la ola de asesinatos.
Luego de su segunda víctima, Dahmer mató dos personas en 1988, uno en 1989, cuatro en 1990 y ocho en 1991. Su última víctima logró huir y fue quien avisó a la policía.
Ressler asegura que algunos de los crímenes de este asesino serial fueron desorganizados, pero otros fueron muy bien premeditados. Por eso lo denominó un asesino “mixto”.
Su motivación siempre fue sexual y en la entrevista le confesó a Ressler que acostumbraba a masturbarse encima de sus víctimas.
Dahmer murió en noviembre de 1994 en manos de otro preso, apaleado en el baño hasta morir.